Tengo vistas muchas puertas de muchos estilos, de muchos tamaños, con molduras y sin ellas, pero tengo que confesar que nunca había visto ninguna rematada con un rosetón en la moldura superior y que en esos rosetones hubiera detalles de antiguos mapas. Y confieso que tampoco había visto hasta ahora una cocina en un patio interior. Al parecer este era el sitio idóneo para ubicarla tras la reforma integral de este piso parisino y la verdad es que el resultado es fantástico, incluyendo esa luz cenital que se cuela por el techo de cristal. Lo que sí había visto antes -y me sigue gustando tanto como el primer día- es este sofá My Beautiful Backside de Moroso.